Oh Dios de mi alma
¿ Quien se apiada de mí?
¿Quien me consuela en el dolor,
en la angustia?
¿Quien me cobija con su santo manto?
---o---
Mis ojos quedaron como ciegos,
los brazos de mis enemigos
me acorralan y están por doquier.
¿Porqué Dios santo, tanta maldad?
¿Porqué la ironía y la mofa de los perseguidores?
¿ Es que acaso no hay tregua?
¿No hay señal de paz y sosiego?
La ignominia y la insensatez atan;
la frialdad del hombre y el egoísmo
pretenden dominarnos.
---o---
No permitas que ello nos cause
el desbalance social;
y que nuestros enemigos se apropien
de nuestras creencias, y de nuestra fe.
---o---
Qué haríamos Dios, sin fe?
con un camino pedregoso,
y aunque en cierta forma tortuoso;
tu siempre nos alientas,
nos fortaleces.
---o---
Estamos llamados a la perfección
porque somos creados a imagen
y semejanza tuya.
---o---
Transforma nuestro ser, señor Jesús
Purifica nuestro espíritu, señor Jesús
Y enséñanos el sendero correcto
para llegar a Dios Padre,
dador de vida,
para enaltecer tu nombre santo;
¡Qué dicha! ¡Qué alegría!
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